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6 mayo 2024

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BILBAO: Urdiales, Chacón y Leal incomprensiblemente fuera de la feria

Llevo más de cuarenta años yendo a Bilbao. Desde muy joven, siguiendo a Ruiz Miguel, mi torero de cabecera, hasta ahora. Algún año no fui, pero no más de dos seguidos.Tres o cuatro corridas cada Aste Nagusia, no me llegaba para más, y siempre en un tendido de sol, caro, todo hay que decirlo, pero nunca he sido de andanada. Las mejores faenas de los últimos años han sido de Diego Urdiales, que toreaba poco pero en Bilbao se transformaba y dejaba auténticas obras de arte. Leo los carteles y no me lo puedo creer: lo han dejado fuera los mercaderes del toreo. Se han repartido los pellejos de una feria herida de muerte sin contar con el maestro de Arnedo. Le ofrecieron algo, sin duda, pero Diego es dueño de su hambre y no ha podido aceptar las migajas de un pastel que huele a rancio. Dobletes, tripletes y a media plaza, si tienen suerte. Y el toro de Bilbao, edulcorado y suavizado para que no sufran en exceso los rentistas. A Paco Ureña, cuatro orejas en la última feria, lo han colocado al final en un cartel postinero. Poca renta para un torero que reventó Bilbao. A Juan Leal, que ha lidiado con éxito Miuras y Fuente Ymbro; y la lío gorda en la última Aste Nagusia, y no salió a hombros porque Matías no quiso, también lo han dejado fuera. A Octavio Chacón, extraordinario con dos miuradas, la primera de infarto matando tres por cornada del bravo Leal, también lo han dejado fuera. Se han repartido los cromos entre los comisionistas que se van a llevar hasta el penúltimo euro sin pensar en un mañana. Bilbao con las figuras y con un toro que nunca se vio en Vista Alegre no van a levantar una feria que fue señera y de categoría. Con la tele y lo que apañen con media plaza, les saldrá las cuentas y los porcentajes pero no salvarán una Aste Nagusia herida. Los asientos son cómodos y bonitos, pero las caras entradas y lo que se ofrece, están muy lejos de aquellos años juveniles que yo disfruté con el León de la Isla y con mis recuerdos en blanco y negro. Veré alguna por la tele pero en el botxo, y créame que lo siento, no me pillan aunque me quiten las fundas.