En la PuertaFernando López Vázquez, un torero de exquisitos procedimientos ante los toros vio publicado en 1991 su valiente ensayo biográfico que llevó por título el apodo que, en una crónica aparecida en el diario capitalino Excélsior, le impusiera para la posteridad, firmando como Don Inmodesto, el que después pasaría a la historia universal del toreo y de las letras como José Alameda: El Publicado antes en «LA ALDEA DE TAURO»
Relecturas de verano (XII)
