ANTONIO –QUISO SABER UN AMIGO POCO DESPUÉS DE AQUELLA TARDE EN SAN ISIDRO- ¿QUÉ SENTÍAS CUANDO TE ACLAMABAN DE ESA MANERA? -MIRA, EN AQUELLOS MOMENTOS –DIJO EL DIESTRO- IBA DANDO GRACIAS A DIOS, DICIÉNDOLE: “¡SEÑOR, TUYO EL PODER Y TUYA LA GLORIA!” Un torero sin pose Conocí a don Antonio Mejías Jiménez, de la dinastía torera de los Bienvenida, hijo de Manuel Mejías Rapela, el legendario Papa Negro, y de doña Carmen Jiménez, sevillana del Barrio de Santa Cruz, y hermano de varias figuras gloriosas del toreo, a mediados de los setenta, en las cercanías de Huelva, a primera hora de la tarde, bajo…