Manuel Escribano –en sustitución de Morante de la Puebla- selló una tarde de entrega máxima y el palco no le concedió la segunda oreja pedida en el cuarto; Juan Ortega pinchó una inspirada obra al quinto y Clemente, con su acusado concepto clásico, cortó tres orejas y se erigió a hombros de la Feria de…